Por el Grupo B de la Champions League, Galatasaray recibía a
Juventus, en un partido determinante para sus aspiraciones, ya que si hoy no
ganaba no podía clasificar a otra fase. El único aliciente era que podía
ingresar a la Europa League. A pesar de las expectativas y de los pronósticos,
el primer tiempo no pudo completarse, debido a la intensa nieve que cayó en el
estadio.
Mientras se jugaba la primera etapa, debido a la nieve que estaba
tapando el verde césped, el árbitro decidió cambiar la pelota, por otra de
color rojo, para que el partido continúe. Sin embargo, unos minutos después, el
referee detuvo el juego, hablo con algunos jugadores de ambos equipos y les
comunico que el encuentro se suspendía por unos minutos, para que los empleados
del club de Turquía, limpien la nieve.
Entonces, los futbolistas de ambos
cuadros, se retiraron a los vestuarios y aguardaron las novedades. Finalmente,
varios minutos después, el árbitro decidió suspender el encuentro ya que el
campo de juego seguía cubierto de nieve, a pesar del trabajo que estaban
haciendo los auxiliares de Galatasaray.
En los minutos que se jugó el encuentro, primero con lluvia
y finalmente con nieve, el combinado local manejo la pelota con paciencia, pero
le faltaba ingenio para llegar con claridad. Luego de ese arranque, el conjunto
italiano se fue adelantando unos metros y de contraataque, generó dos
situaciones de riesgo.
Debido a esto, el partido se había vuelto intenso, ya
que Galatasaray controlaba el juego y Juventus, en el contragolpe, era un rival
peligroso. Sin embargo, el encuentro no pudo seguir, por la cuestión climática
ya mencionada.
Por Diego Bentivegna
@bentidiego
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